Noticias / Campaña de Prevención
Síntomas de la Gastritis
Los Síntomas de la gastritis deben ser tratados
Síntomas de Gastritis
Gastritis Aguda
La gastritis, por lo general, no causa síntomas. Cuando se presentan, varían dependiendo de la causa y pueden consistir en dolor o malestar, o en náuseas o vómitos, problemas que con frecuencia se conocen como indigestión (dispepsia).
Gastritis Crónica
La gastritis erosiva, la gastritis por radiación, la enfermedad de Ménétrier y la gastritis linfocítica pueden causar náuseas y vómitos intermitentes.
Puede aparecer disepsia, especialmente en la gastritis erosiva, la gastritis por radiación, la gastritis por postgastrectomía y la atrófica. También puede producirse dispepsia muy leve en la gastritis aguda por estrés.
Complicaciones de la gastritis
Las complicaciones de la gastritis son
- Hemorragia
- Úlceras
- Estrechamiento de la salida del estómago
La gastritis aguda por estrés puede derivar en hemorragia a los pocos días de una enfermedad o lesión, mientras que la hemorragia tiende a evolucionar más lentamente en el caso de la gastritis erosiva crónica o la gastritis por radiación. Si la hemorragia es leve y lenta, es posible que la persona no presente síntomas o que solo note un color negruzco en las heces (melena) que tiene su origen en el color oscuro de la sangre digerida. Si la hemorragia es más rápida, la persona puede vomitar sangre o puede pasar sangre a las heces. La hemorragia persistente causa síntomas de anemia, como cansancio, debilidad y aturdimiento.
La gastritis puede derivar en la formación de úlceras estomacales (úlceras gástricas) y provocar un empeoramiento de los síntomas. Si una úlcera atraviesa (perfora) la pared del estómago, el contenido gástrico se esparce en la cavidad abdominal, produciendo inflamación y frecuentemente infección del revestimiento de la cavidad abdominal (peritonitis), con un empeoramiento súbito del dolor.
Algunas complicaciones de la gastritis evolucionan lentamente. La cicatrización y el estrechamiento de la salida del estómago, que puede ser consecuencia de la gastritis, especialmente en la gastritis por radiación y eosinofílica, pueden causar náuseas intensas y vómitos frecuentes.
En la enfermedad de Ménétrier puede producirse retención de líquidos e hinchazón de los tejidos (edema) a causa de la pérdida de proteínas de la mucosa gástrica inflamada. Cerca del 10% de las personas con enfermedad de Ménétrier desarrollan cáncer de estómago al cabo de unos años.
La gastritis postgastrectomía y la gastritis atrófica provocan síntomas de anemia, tales como cansancio y debilidad, a causa de la disminución de la producción del factor intrínseco (una proteína que se une a la vitamina B12, permitiendo que la vitamina B12 sea absorbida y utilizada en la producción de glóbulos rojos).
Un pequeño porcentaje de personas con gastritis atrófica desarrollan metaplasia. En un porcentaje aún menor de casos, la metaplasia deriva en un cáncer de estómago.
Diagnóstico
- Endoscopia digestiva alta
El médico sospecha de la existencia de una gastritis cuando una persona tiene malestar, dolor o náuseas en la zona superior del abdomen. Generalmente, no se requieren pruebas. Sin embargo, si el médico tiene dudas sobre el diagnóstico, o si los síntomas no desaparecen con el tratamiento, el médico puede llevar a cabo una endoscopia alta. Durante la endoscopia digestiva alta, el médico utiliza un endoscopio (un tubo flexible de visualización) para examinar el estómago y parte del intestino delgado. Si es necesario, el médico puede realizar una biopsia (extracción de una muestra de tejido para su examen al microscopio) de la mucosa gástrica.
Tratamiento
- Fármacos que reducen la producción de ácido y antiácidos
- A veces, antibióticos que tratan la infección por H. pylori
- Tratamientos para detener la hemorragia
Sea cual sea la causa de la gastritis, los síntomas de gastritis se pueden aliviar con fármacos que neutralicen o reduzcan la producción de ácido gástrico e interrumpiendo el tratamiento con aquellos fármacos que causan los síntomas.
Fármacos para la gastritis
Cuando los síntomas son leves, generalmente basta con tomar antiácidos, que neutralizan el ácido que ya ha sido producido y liberado en el estómago. Casi todos los antiácidos pueden adquirirse sin prescripción médica y están disponibles en forma de comprimidos o líquidos.
Los antiácidos son: hidróxido de aluminio (que puede causar estreñimiento), hidróxido de magnesio (que puede causar diarrea) y carbonato de calcio. Como los antiácidos pueden alterar la absorción de muchos otros fármacos, las personas que toman otros fármacos deben consultar a un farmacéutico antes de tomar antiácidos.
El médico puede recetar sucralfato, que ayuda a revestir y curar el estómago y también previene la irritación.
Cuando la gastritis está causada por una infección por H. pylori, también se prescriben antibióticos.
Otros tipos de gastritis
No existe cura para la gastritis postgastrectomía o la gastritis atrófica. Las personas con anemia causada por la disminución de la absorción de vitamina B12 debida a la gastritis atrófica deben recibir inyecciones de suplementos de dicha vitamina durante el resto de su vida.
Para la desobstrucción de la salida del estómago producida por la gastritis eosinofílica hay que recurrir a los corticoesteroides o a la cirugía.
La enfermedad de Ménétrier puede curarse mediante la extirpación parcial o total del estómago. No existe un tratamiento farmacológico eficaz.